Y es que desde el pasado 31 de agosto, no hemos dejado de reivindicar en la calle la reinclusión en el sistema educativo andaluz de más de 5.700 profesores afectados por los recortes (4.502 aspirantes a vacantes), durante un curso escolar en el que contamos con 30.000 alumnos más en escuelas e institutos. A tal efecto hemos protagonizado numerosas concentraciones frente a instituciones públicas de todo tipo; hemos denunciado nuestra situación compartiendo techo con los desahuciados de La Corrala la Utopía; nos hemos embarcado en una larga marcha-reivindicativa que nos ha llevado de Antequera a Sevilla, para comprobar que el sentir de esta tierra está con nosotros; hemos colaborado con movimientos sociales, para demostrar que otro mundo es posible. Hemos luchado con denuedo, y haciendo gala de un altísimo sentido del civismo, para que imperen la Razón y la Justicia.
Pero solo hemos hallado cerrazón, por parte de don Ignacio Wert, y buenas palabras, y ninguna voluntad real de mejorar nada, por parte de doña Mar Moreno. A Moreno, precisamente, le hemos dejado una serie de propuestas, del todo factibles, para lograr reincorporarnos a todos; pudiendo devolver, así, la salud a uno de los sistemas educativos que menos se pueden permitir una auténtica escabechina entre su profesorado.
De ella no hemos recibido más que lastimeras explicaciones, y alguna que otra promesa, nada creíble. Ante estas actitudes, y porque somos sabedores de que los países mueren cuando sus sistemas educativos navegan a la deriva en procelosas aguas, gobernados por los almirantes más ciegos, hoy, día 17 de mayo de 2013, un nutrido grupo de profesores y profesoras comprometidos con la realidad del mundo que les ha tocado vivir, hemos vuelto a las aulas, por nuestro propio pie, porque parece que no nos permiten hacerlo de otra manera.
¿Que por qué hemos elegido el IES Las Aguas para volver?
Porque es uno de los que están a punto de cerrar sus puertas, a causa de las agresivas políticas de recortes de los unos, y de la sospechosa pasividad de los otros; porque cerrar un instituto en un barrio humilde como el de San Pablo, es, al igual que poner de patitas en la calle a varios miles de docentes, un atentado contra la garantía constitucional de que todos nuestros jóvenes van a tener el derecho a recibir una Educación Pública y de Calidad. Elegimos este centro como perfecta y terrible metáfora; porque refleja lo que en un país civilizado jamás debería ocurrir.
Y de sus cuatro paredes no vamos a salir, hasta que la Consejería de Educación nos devuelva a todos al lugar del que nos arrancaron; asimilando, para ello, las dos horas extra con las que los decretazos de Rajoy cargan a todos los funcionarios, a guardias y tutorías. Porque doña Mar Moreno podrá tener más o menos limitaciones a la hora de desarrollar su quehacer político, pero sabe perfectamente que nuestra propuesta es perfectamente asumible por su gabinete, ya que existen normas que posibilitan el cómputo de las horas de guardia y las tutorías como lectivas. En sus manos está nuestro futuro, que no es otro que el futuro inmediato de la Educación Andaluza. Y mientras no obre justamente, de aquí no nos iremos.
Pincha aquí para ver el vídeo
