¿Está el SAT detrás de la huelga organizada desde ADIUS?
Desde el SAT-US valoramos de manera muy positiva la alta participación en la consulta organizada por la Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad de Sevilla (ADIUS), más de 1000 profesores y profesoras, así como el apoyo de más de 700 votantes a la huelga en los exámenes de enero-febrero de 2014. Se trata de un hecho histórico de autoorganización colectiva en nuestra Universidad que marca un precedente democrático de gran importancia.
En este contexto, en vez de escuchar a la plantilla y entrar en una dinámica de diálogo formal y vinculante en una Mesa de Negociación, el Equipo de Gobierno de nuestra Universidad va lanzando rumores, y haciendo declaraciones a la prensa y en Consejo de Gobierno, diciendo que nuestra sección sindical, el SAT-US, está detrás de la convocatoria de huelga organizada desde ADIUS.
En este sentido, manifestamos que parte de la afiliación del SAT en el personal docente e investigador (PDI) viene participando en ADIUS desde hace años, igual que, afortunadamente, hay gente afiliada a otros sindicatos. Esta es una de las fortalezas de ADIUS: su diversidad en la unidad. Esta participación la realizamos en todo momento con la mayor honestidad.
De cara a la huelga en los exámenes de Enero-Febrero de 2014, desde ADIUS se solicitó a todas las secciones sindicales el apoyo, y la asamblea de nuestra sección sindical respondió afirmativamente poniendo nuestra herramienta sindical al servicio de la plantilla. Este apoyo se ha plasmado en nuestra defensa en los órganos de representación del PDI (Comité de Empresa y Junta de Personal) de las propuestas de ADIUS, en acciones propias de nuestro sindicato y en la convocatoria de una asamblea de la plantilla en septiembre coincidiendo con una asamblea de ADIUS en la que se convocó la huelga ratificada en la consulta de noviembre.
El dar a entender que es desde el SAT-US desde donde se está controlando el proceso de construcción de la huelga, además de ser irreal, es faltar al respeto y minusvalorar a todos y todas las compañeras que sin ser del SAT-US, la mayoría, están trabajando desde las bases de nuestra Universidad en pro de su defensa y a los más de 700 profesores y profesoras que han votado sí a la huelga. Es faltar el respecto a ADIUS, una asociación que cuenta con el apoyo mayoritario del profesorado contratado de nuestra Universidad tal y como mostraron las últimas elecciones al Claustro.
Desde el Equipo de Gobierno también se dice que nuestro sindicato es un sindicato de “radicales”. Si por “radicales” se refieren a que vamos a las raíces de los problemas cuando los enfrentamos, sí, somos radicales, preferimos solventar las causas a que queden remanentes y el problema aparezca recurrentemente. Si por “radicales” se refieren a que somos combativos en nuestra acción sindical, sí lo somos. Pero también sabemos y queremos dialogar, cosa a la que el Rector se niega de momento. Pero si por “radicales” quieren decir que utilizamos la violencia, mienten, si quieren decir que somos intransigentes, se equivocan. ¿Qué hay más intransigente que no querer convocar una Mesa de Negociación, como hay en otras universidades, incluso poniendo en riesgo la evaluación del alumnado?
Por otro lado, las burocracias sindicales de CCOO y UGT plantean una postura de equilibrio imposible, felicitando a ADIUS por la consulta pero sin posicionarse a favor de las ‘líneas verdes’ ni de la huelga a la que va una parte muy importante de la plantilla. En estos momentos tan cruciales, pensamos que una posición como ésta se alinea y le hace el juego al Equipo de Gobierno que se niega a un diálogo formal en una Mesa de Negociación, en vez de representar los intereses de la plantilla, especialmente de aquella en condiciones más precarias.
Este comunicado viene a aclarar algunos puntos que creíamos necesarios. Pero más allá de las palabras, llamamos a la plantilla a unirnos desde abajo en la defensa de nuestros derechos y de nuestra Universidad, remando ahora en la unidad hacia la huelga de exámenes de 2014. En la mano del Rector está el evitarlo.