El Instituto de Desarrollo Regional (IDR) es una fundación universitaria, adscrita a la Universidad de Sevilla, especializada en la investigación, formación de expertos y organización de actividades sobre Ciencia Regional. Se trata de una entidad sin ánimo de lucro que cuenta con el apoyo económico de instituciones públicas y privadas, y que desde su creación ha llevado a cabo casi trescientos trabajos de investigación y ha publicado un centenar de libros.
El órgano al que corresponden las funciones de gobierno y representación del IDR es el Patronato, presidido por el Rector de la Universidad de Sevilla y del que forman parte las siguientes instituciones: Universidad de Sevilla, Junta de Andalucía, Consejo Social de la Universidad de Sevilla, Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía, Diputación Provincial y Ayuntamiento de Sevilla.
El Director del IDR es D. Gabriel Cano García Catedrático de la Universidad de Sevilla, quien preside el Comité Ejecutivo compuesto por Dña. Francisca Ruiz Rodríguez y Dña. Reyes González Relaño, así como por dos miembros del Patronato.
Tras haber llegado a contar con una plantilla de más de 40 trabajadores, en la actualidad el IDR se encuentra en una situación muy preocupante derivada de los siguientes hechos:
1.- Desde el mes de diciembre de 2010 hasta ahora, se han extinguido 8 contratos de trabajo y 4 becas de investigación, quedando una plantilla actualmente de 10 trabajadores (afectados en un Expediente de Regulación de Empleo Temporal con reducción de jornada de un 43 %, hasta el 30 de junio de 2011).
2.- Se han desatendido pagos de Acreedores (alquiler, teléfono, electricidad, limpieza, etc……), asumiendo el riesgo de que se pueda declarar un concurso de acreedores.
3.- La Institución no se encuentra al corriente de las obligaciones tributarias y de seguridad social, lo que supone un riesgo importante a la hora de la consecución de contratos con la Admón. Pública, convocatoria de subvenciones, así como la probabilidad de reintegro de subvenciones por imposibilidad de justificarlas.
4.- La reclamación de los cobros pendientes de clientes, no están dando resultado alguno.
5.- Los resultados de la gestión actual de captación de proyectos de investigación, no está resultando ni suficiente ni efectiva para la viabilidad de la Institución y la garantía de mantener los puestos de trabajo que aún existen.
Todas estas circunstancias sugieren la necesidad de que se tomen medidas para evitar que una institución como el IDR con una trayectoria de casi 40 años desaparezca del ámbito de la investigación social y económica de Andalucía cuando se trata de un referente regional de la misma.
En este sentido, los trabajadores del IDR piden a los máximos responsables de la institución que se impliquen en la reversión de la situación actual para garantizar la viabilidad de la misma así como la de sus puestos de trabajo.